Rastrean los usos de animales en la medicina tradicional
El Grupo de Investigación de Recursos Etnobiológicos del Duero-Douro de la Universidad de Salamanca ha realizado un estudio acerca de los usos de los animales en la medicina tradicional. Este trabajo tiene un doble objetivo: ser una recopilación de un saber popular y ofrecer pistas para rastrear posibles compuestos que puedan ser útiles para la medicina.
La planta ‘Heliotropium europaeum L. (Boraginaceae)’, empleada popularmente contra el escorpión por la similitud con el animal. Imagen: José Antonio González/DiCYT.
La investigación se enmarca dentro de un ambicioso proyecto denominado «Inventario Español de los Conocimientos Tradicionales», que trata de rescatar conocimientos de la medicina popular relacionados con plantas y con animales.
«La mayor parte de los científicos participantes son botánicos, porque los datos de animales son escasos y están muy dispersos», según ha explicado a DiCYT el zoólogo José Antonio González, miembro del Grupo de Investigación de Recursos Etnobiológicos del Duero-Douro (GRIRED) que firma una de las primeras publicaciones científicas de este proyecto en colaboración con José Ramón Vallejo, investigador de la Universidad de Extremadura. Por eso, este artículo, que hace referencia al escorpión y acaba de aparecer en la revista científica Journal of Ethnopharmacology, es especialmente original.
La mayor parte de los usos curativos o preventivos, en el caso de los animales, tienen que ver con supersticiones
“Lo primero que hemos hecho ha sido buscar en las bases de datos y consultar las referencias bibliográficas y ahora estamos empezando a publicar los resultados”, explica en especialista.
El caso del escorpión ha sido uno de los primeros en salir publicados porque resulta especialmente curioso el amplio abanico de remedios que los investigadores han podido recopilar. Se trata de remedios preventivos, para evitar la picadura del alacrán, y curativos, como tratamiento una vez que la picadura se ha producido.
En algunos casos dichos remedios se encuentran en el propio escorpión. Así, desde la Edad Media está documentado el uso de aceite de escorpión que se aplica en la zona afectada, aceite resultante de freír los propios escorpiones. Aunque en principio se puede considerar un remedio mágico, los científicos no han encontrado ninguna publicación que haya analizado químicamente este ungüento, así que no descartan una base científica.
La mayor parte de los usos curativos o preventivos en el caso de los animales tienen que ver con supersticiones. Sin embargo, en algunos casos este uso puede tener un origen empírico, es decir, que su utilización como remedio en determinadas situaciones esté relacionada con una verdadera efectividad con base bioquímica.
Entre las acciones tradicionales que tratan de evitar la picadura de escorpión está el uso de plantas como la ruda y el ajo que por su fuerte olor espantarían al alacrán, según la creencia popular.
Mucho más variados son los remedios curativos, que aparte de emplear el propio escorpión y de recurrir a las más diversas supersticiones, también echan mano de las plantas medicinales de cada zona. En algunos casos, esta utilización se basa en ideas pseudocientíficas como la teoría de las signaturas, que popularmente atribuía propiedades a las plantas según su aspecto, de manera que una planta con forma similar a la de un escorpión debería indicar que era adecuada para tratar su picadura.
Un inventario de conocimientos tradicionales
Uno de los retos de los científicos es relacionar las referencias bibliográficas y testimoniales que van encontrando con la correcta taxonomía de las especies. Por ejemplo, recientemente y gracias a los análisis genéticos, se ha comprobado que en la península Ibérica hay varias especies de escorpiones y no sólo una como se pensaba. En cualquier caso, en la cultura popular este animal se ve como letal y amenazador cuando en realidad en estas tierras, a diferencia de otros continentes, la picadura de escorpión no suele acarrear problemas graves.
Además de los trabajos científicos, los investigadores tienen pensado realizar una serie de fichas divulgativas con la información que vayan recopilando en torno a distintos animales, de acuerdo con los objetivos del Inventario Español de los Conocimientos Tradicionales.
Hasta el momento, ya han estudiado numerosos animales relacionados con la medicina tradicional: el uso de telarañas para heridas, piojos contra la ictericia o moscas para orzuelos. Sin embargo, algunas de estas prácticas populares no respaldadas por la ciencia no sólo no resuelven los problemas sino que puede acarrear otros problemas de salud, como la transmisión de patógenos, advierte José Antonio González.
Uso de telarañas para heridas, piojos contra la ictericia o moscas para orzuelos: más problemas para la salud
Gran variedad de animales y plantas
En cualquier caso, animales como anfibios, sanguijuelas o peces van enriqueciendo este catálogo de remedios populares, aunque son las plantas medicinales las más indicadas en la cultura popular para todo tipo de dolencias.
“El objetivo es recopilar toda esa información dispersa y ofrecer a los farmacólogos y químicos una lista de animales y plantas con potencial para la investigación”, indica el experto.
Aparte de este campo relacionado con la zoología, los investigadores del GRIRED de la Universidad de Salamanca tienen una amplia experiencia en trabajos etnobiológicos en la zona de Arribes del Duero, que hasta ahora se habían centrado en la botánica. La idea es la misma: preservar los conocimientos populares como legado cultural y como posible fuente para el hallazgo de nuevos compuestos para la farmacología.
Referencia bibliográfica
González JA, Vallejo JR. The scorpion in Spanish folk medicine: A review of traditional remedies for stings and its use as a therapeutic resource. Journal of Ethnopharmacology.