La borreliosis de Lyme, transmitida por las garrapatas, un problema europeo de salud pública
La borreliosis de Lyme es la enfermedad transmitida por garrapatas más frecuente y extendida en Europa, con una incidencia media anual estimada en Europa occidental de 22 casos por 100.000 habitantes. A pesar de esto, sigue siendo una gran desconocida. Su epidemiologia es muy imprecisa, está infradiagnosticada y su vigilancia es muy irregular en las diferentes zonas. Su reciente entrada en el debate político europeo podria cambiar esta situación.
Europa es abundante en garrapatas Ixodes ricinus, principal vector de la enfermedad de Lyme en la UE. Su amplia distribución geográfica implica que esta especie de garrapata puede sobrevivir en diversas condiciones ambientales, aunque su necesidad de un alto grado de humedad hace que podamos encontrarla preferentemente en bosques caducifolios y mixtos u otros hábitats con un microclima húmedo.
En los últimos años, varios países de la UE han descrito cambios en la distribución geográfica de esta especie, detectándola en altitudes y latitudes más altas.
A través de sus picaduras, Ixodes ricinus está involucrada en la transmisión de diversos patógenos, entre ellos la bacteria Borrelia burgdorferi, causante de la borreliosis de Lyme, que, según datos del ECDC, se estima que afecta de media anual a 22 personas de cada 100.000 en la UE. Sin embargo, está ampliamente reconocido que la heterogeneidad de su vigilancia en Europa, que permitiria evaluar con precisión la incidencia, la distribución y la tendencia de la enfermedad a lo largo del tiempo, sigue siendo un desafio pendiente.
La prevalencia media general de las genospecies de B. burgdorferi en las garrapatas en Europa se ha estimado en alrededor del 12%, con una mayor prevalencia en las garrapatas adultas que en las ninfas. Europa Central es la región con las tasas más altas de infección (ninfas > 10%; garrapatas adultas > 20%), específicamente en Austria, República Checa, el sur de Alemania, Suiza, Eslovaquia y Eslovenia.
Un problema europeo de salud publica
La preocupación por la dimensión de la propagación de la enfermedad de Lyme entre la población europea, ya que, según el método de recogida de datos utilizado, se considera que cerca de un millón de ciudadanos padecen esa enfermedad, ha hecho que se convierta en tema de debate del Parlamento Europeo.
El pasado mes de agosto se preguntó a la Comisión Europea acerca de las medidas que tiene previsto establecer para mejorar la prevención, la vigilancia y el tratamiento de esta enfermedad, a la que se ha dado el nombre de «epidemia silenciosa». La mordedura de una garrapata infectada y los síntomas de la borreliosis de Lyme, que entre otros puede afectar al sistema nervioso, al sistema musculo-esquelético o al corazón, pueden pasar desapercibidos o incluso, en algunos casos, pueden resultar asintomáticos, generando, en ocasiones, graves complicaciones y daños irreversibles similares a los de una enfermedad crónica, particularmente cuando el paciente no obtiene un diagnóstico con rapidez.
Las garrapatas infectadas y la enfermedad parecen estar extendiéndose geográficamente, registrándose actualmente también casos en altitudes y latitudes más elevadas, así como en ciudades. Entre las supuestas causas de este fenómeno están los cambios en el uso de la tierra, el cambio climático, el calentamiento global, la humedad excesiva y otros factores relacionados con la actividad humana. Sin embargo, no existe en la UE una descripción precisa de la epidemiología de la enfermedad de Lyme.
Por lo que, entre las cuestiones planteadas a la CE, estuvieron la posibilidad de establecer un programa de vigilancia de la enfermedad a nivel de la UE para poder conocer su impacto real y las posibles medidas para sensibilizar en mayor medida al público sobre la borreliosis de Lyme.
Propuesta de resolución del Parlamento Europeo
En respuesta a dicha consulta, el pasado 5 de noviembre el Parlamento Europeo emitió una propuesta de Resolución en la que, entre otros muchos puntos, solicita a la CE que se introduzca en todos los Estados miembros la obligación de notificar los casos de la enfermedad de Lyme que se detecten.
Otra petición fue dirigida a los Estados Miembros, a los que solicitó que tomen medidas de control de las garrapatas y potencien las medidas de profilaxis individual frente a sus picaduras, para frenar la propagación de la borreliosis. Asimismo, invitó a los Estados Miembros a que, con el apoyo de la CE, pongan en marcha una campaña de información y sensibilización para alertar de la enfermedad de Lyme a la población, sobre todo en las regiones más afectadas por la propagación de dicha enfermedad y en los colectivos más expuestos.
Prevención de picaduras y control de garrapatas
El control de las poblaciones de garrapatas establecidas puede ser difícil y, como en el caso de muchos vectores de enfermedades, requiere un enfoque de control integrado de plagas. Se pueden usar diferentes métodos para las diferentes especies de garrapatas, dependiendo de sus preferencias de hábitat y hospedador.
Para evitar las picaduras de las garrapatas, el ECDC recomienda:
- Utilizar ropa adecuada: ropa de colores claros, pantalón largo metido por dentro de los calcetines, manga larga, gorra y camiseta por el interior del pantalón.
- Tratar los calcetines y las perneras de los pantalones con insecticida que contenga permetrina.
- Mantener un tratamiento antiparasitario adecuado en perros
- Utilizar un repelente adecuado
- Evitar pasar por zonas con hierbas altas, las garrapatas suelen esperar a su hospedador en la parte superior de la vegetación
- Procurar caminar por el centro de los senderos y no sentarse o tumbarse en sus orillas.
- No tocar el ganado ni los animales silvestres.
- Revisar la posible presencia de garrapatas en la ropa durante y al acabar el paseo.
- Las picaduras no suelen generar dolor ni picor, por eso es importante después de pasear revisar la ropa, el cuerpo y también al perro. Las larvas de garrapatas son muy pequeñas, por lo que esta revisión debe ser completa, poniendo especial atención en zonas donde la piel es fina, tiene mayor flujo sanguíneo o forma pliegues (ingles, axilas, cabeza, parte posterior de orejas, codos, rodillas, etc.)
Fuentes: http://www.europarl.europa.eu/portal/es y ECDC