Jejenes
Qué es un jején
El jején también se conoce como mosca negra, aunque puede ser negro o gris. Se trata de un insecto muy pequeño, no más grande que la cabeza de un alfiler a lo sumo de 2 a 3 mm. Se los puede encontrar en cualquier parte del mundo donde haya ríos o arroyos, porque ponen sus huevos en lugares con agua. Necesitan de la sangre de animales de sangre caliente para sobrevivir. Pueden picar a las personas a través de la ropa para obtener sangre.
Tienen el cuerpo cubierto de pelos. Su vuelo es típico de los flebotómidos, con trechos cortos. El ciclo vital (pasando por los estados de huevo, larva y pupa) hasta llegar a adulto es de aproximadamente 3 a 4 semanas. Los adultos viven alrededor de 30 días.
Al igual que otros flebotomos, los adultos se alimentan de azúcares de las plantas, néctar, o de secreciones de pulgones. Las hembras también requieren alimentarse de sangre para producir sus huevos. Su saliva contiene substancias que previenen la coagulación de la sangre y causan gran irritación.
Ciclo de Vida
De acuerdo con la especie, los huevos de los jejenes son puestos en la tierra o en el agua. La larva, dependiendo de la especie, es capaz de permanecer inmóvil o de moverse hacia las rocas y las plantas de agua. Los machos se reúnen en grandes grupos, conocidos como enjambres, para aparearse. La mayoría de estos enjambres aparecen al anochecer en grandes terrenos abiertos y sobre las calles.
En las fases de larva y adultos, los jejenes son considerados al mismo tiempo benéfico y dañino. Son benéficos porque algunas especies son excelentes transportadoras de polen para las plantas y porque se alimentan de plagas de las cosechas, como los pulgones y los insectos de la súper familia coccoidea. Son dañinos porque otros jejenes, como la mosca Hess, son plagas por sí mismos para las cosechas.
La hembra de estos mosquitos puede poner hasta 300 huevos en la superficie de la tierra de una sola planta. Estos huevos eclosionan después de cinco o seis días y permanecen en la fase de larva de 10 a 14 días, alimentándose de la materia orgánica dentro de la tierra de la planta. Si hay muchos mosquitos fungosos presentes y la población se incrementa a un ritmo acelerado, las raíces de las plantas y el sistema de raíces estarán en peligro.
La hembra de algunas especies, como la de los jejenes negros, se alimenta de sangre. Estos jejenes son conocidos por llevar parásitos y trasmitir enfermedades a los humanos y al ganado. Debido a la propagación de la enfermedad oncocercosis, o Ceguera de los Ríos, y otras preocupaciones de salud, numerosos programas han sido establecidos a través del mundo para controlar la población de jejenes.
La larva de los mosquitos fungosos o jejenes
La hembra de estos mosquitos pone huevos pequeños de color amarillo-blancuzco en la superficie de la tierra húmeda. De la larva emergen cuerpos sin patas, blancos o transparentes, con cabezas negras. Su total crecimiento llega a ser de hasta ¼ de pulgada de largo. Las larvas viven en el interior del suelo antes de pasar a la fase de pupa. La pupa es inicialmente blanca, pero se oscurece cuando el insecto madura.
Algunas larvas de los mosquitos fungosos son conocidas por su propensión a alimentarse de raíces y de los tejidos de los tallos de la parte más baja de las plantas. Esos hábitos alimenticios debilitan y matan la planta afectada. Estos mosquitos son considerados una plaga mayor y pueden causar severos daños a las plantas de las casas y a las cosechas comerciales. Las plantas jóvenes son altamente susceptibles al daño de los mosquitos fungosos. En este tipo de mosquitos, los adultos y las larvas son también capaces de expandir varios patógenos a las plantas, lo que puede causar que la raíz y la corona se pudran.
Qué sensación produce la picadura de un jején
Una persona puede no darse cuenta inmediatamente de que le ha picado un jején. Pero poco después, la zona de la picadura comenzará a inflamarse. Puede que salga un poquito de sangre de la picadura. Picará mucho y podrá ser dolorosa. Si te ha picado un jején, lava la picadura con agua y jabón. Puesto que los jejenes pueden llevar consigo bacterias de otros lugares donde han estado (como comida podrida o animales muertos), también es conveniente limpiar la picadura con un poco de antiséptico. Se puede conseguir en la farmacia una crema que alivie la picazón u otro medicamento que puedas ingerir y que también aliviará la picazón. Poner una bolsa de hielo sobre la picadura también aliviará el dolor.
Si la zona de la picadura está muy inflamada, puede que el médico prescriba una crema especial o un medicamento de administración oral. Si la picadura se infecta por rascarse, el médico también podrá prescribir un antibiótico para eliminar la infección.
Aunque es muy extraño que una persona tenga una reacción alérgica a la picadura de un jején, se debería avisar de inmediato a alguna persona si se siente mal, si se tiene dificultad para respirar o si sale una urticaria (manchas rojas en la piel que arden y pican). El médico puede tratar las reacciones alérgicas con medicamentos.
Transmisión de enfermedades
La leishmaniasis cutánea, transmitida por estos mosquitos, es causada por un protozoo parásito, Leishmania major. El parásito es transmitido junto con la saliva que el mosquito utiliza durante la picadura. Se calcula que todos los años ocurren un millón y medio de casos nuevos y que hay 12 millones de personas.
Las manifestaciones clínicas de la enfermedad van desde úlceras cutáneas que cicatrizan espontáneamente, hasta formas fatales en las cuales se presenta inflamación grave del hígado y del bazo. Es una enfermedad zoonótica que afecta tanto a perros como a humanos. Sin embargo, animales silvestres como liebres, zarigüeyas, coatíes y jurumíes, entre otros, son portadores asintomáticos del parásito, por lo que se les considera animales reservorios.
El agente se transmite al humano y a otros animales a través de la picadura de hembras de los flebótomos, un grupo de insectos chupadores de sangre pertenecientes a los géneros Phlebotomus del Viejo Mundo, (Europa, África y Asia) y Lutzomyia en América, de la familia Psychodidae.1 En Colombia, en ciertas regiones, este tipo de insectos es más conocido como palomilla. En las zonas tropicales de Ecuador se lo conoce como «arenillas».
Su eliminación
Si Ud. está experimentando una infestación, existen varios productos comerciales que le pueden ayudar a controlar la población.
Tradicionalmente la gente usa matamoscas para matar a estos insectos individualmente. Un número de insecticidas y aerosoles pueden ser utilizados en interiores de las casas. Sin embargo, esos métodos requieren identificación positiva de los insectos, razón por la cual es mejor consultar a un profesional en el control de plagas. Los pesticidas requieren una aplicación cuidadosa porque también pueden ser dañinos para las mascotas y los humanos.
Los aparatos electrónicos que electrocutan jejénes individualmente pueden ayudar a controlar la población de estos insectos afuera. Adentro, las trampas para insectos que se conectan en enchufes eléctricos trabajan bien porque emiten una fuente de luz ultravioleta. Los insectos voladores son atraídos a esta luz y atrapados por la superficie pegajosa cuando se aproximan a ella.
La mayoría de estos métodos sirve solamente para especímenes individuales y adultos. Para erradicar totalmente una infestación, incluyendo las larvas, es mejor consultar a un profesional en el control de plagas.